Google siempre había sido el niño mimado de los internautas: su buscador preferido, una empresa 'buena' en la que se podía confiar, que trata bien a sus empleados, que actuaba de contrapeso al vilipendiado Bill Gates? Sin embargo, igual que le está pasando a Steve Jobs (iPhone mediante), Google empieza a sentir que crecen las críticas hacia su política de empresa.
Son muchas las personas que acusan a Google de estar conformando un monopolio. Y también los gobiernos. Por un lado, la Unión Europea acusa al buscador de no respetar la intimidad de sus usuarios; la Agencia Española de Protección de Datos pide que se permita a los usuarios borrar su información cuando quieran; los organismos australianos de defensa de los consumidores arremeten contra el buscador; etcétera. Y encima, pierden un vídeo secretísimo. Eso sí, siempre puede tocarle a Google en suerte un juez que no es entera de nada?
Eso sí: todavía tienen incondicionales que preparan vídeos de homenaje a su buscador favorito.
Aunque no es la única gran compañía que tiene problemas con los reguladores. Intel está sufriendo en sus propias carnes el acoso del Gobierno de Corea del Sur? que sigue la estela de las autoridades europeas.
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